Empezar tus vacaciones estresado, no es una opción. Por eso, preparamos este posteo para ayudarte a empacar tu maleta ¡y aprender a hacerlo como un experto!

Las personas que viajan frecuentemente, suelen tener algunos tips para hacer su maleta de forma sencilla y sin volverse locos.

Tener en mente qué es lo que necesitas llevar, saber cómo guardar todo para entre en la maleta y establecer un orden de prioridades, son algunos de los consejos que te invitamos a repasar antes de embarcarte en una nueva aventura.

A continuación, te damos 8 recomendaciones para que apliques a la hora de armar tus maletas.

Todas ellas, fueron creadas por personas que se trasladan de manera frecuente. Por lo tanto, ¡aplícalas a tu próximo viaje! Te ayudarán para viajar sin preocupaciones, con lo necesario y sin excesos.

Un truco básico para seleccionar lo que necesitas para tu viaje, es repasar tu vestimenta de abajo hacia arriba (como se fuera un escáner).

De esta forma, puedes empezar preguntándote: ¿Qué zapatos necesitaré?, ¿Qué tipo de ropa deberé ponerme? ¿Necesitaré gafas o gorra para el sol?

Este truco evitará que lleves ropa y accesorios no vayas a usar. Por ejemplo, si tu viaje es a la playa, no pueden faltarte unas chanclas, un traje de baño y una gorra. Esto puede parecer básico, pero cubre lo más importante a llevar y lo que más utilizarás.

En los viajes, es muy importante llevar poco equipaje. Una maleta pequeña y con rueditas, es el equipaje ideal. Pero ¿Cómo hacer para que todo quepa?

Un gran consejo para que puedas llevar todo lo que necesitas (y que llegue impecable) es enrollar tu ropa en vez de doblarla.

La ropa enrollada ocupa mucho menos lugar y evita las arrugas. Por lo tanto, enrolla todo lo que puedas, te servirá para llevar todo lo que necesitas sin problemas.

En el afán por llevar todo que lo que queremos (y gracias a algunos truquitos), muchas veces nuestro equipaje queda tan pesado que es imposible levantar.

Esta no es una buena característica. Una maleta liviana es mucho más fácil de transportar, seguramente tendrá lo justo y tendrá espacio para traer lo que compres en tus vacaciones.

Por lo tanto, evita recargar tu maleta. Para eso, ten en cuenta la vestimenta que usas a diario, con la que te sientes cómodo. Además, siempre tendrás la opción de comprar aquello que te hayas olvidado, si es que lo necesitas.

Las botellas grandes de shampoo, acondicionador y lociones suelen ser un problema al momento de pasar por los aeropuertos.

Si quieres evitarte demoras y malos momentos, evita llevar estos productos en tu maleta. Además, puedes darle un toque local a tu viaje, comprando estos productos en una farmacia, en el supermercado o usando los que te brinda el hotel.

Tener un listado de aquello que debemos llevar, puede ser una forma de calmar nuestra ansiedad y organizar nuestra maleta.

Este consejo puede ser conveniente para personas que no viajan con frecuencia y temen olvidarse cosas importantes. Por ejemplo, documentos de viaje, pasajes, medicación, etc.

No obstante, recuerda no sumar productos que puedes conseguir en tu destino o llevar muchos artículos “por las dudas”.

Una buena forma de empacar tu maleta es por un orden de prioridades.

¿Qué es eso que no puede faltar? Empieza incorporando todo aquello necesario, para pasar luego, a esas cosas complementarias.

Por ejemplo, en tu maleta no pueden faltar: tu pasaporte, pasajes de avión, dinero, tarjetas de crédito y débito, teléfono celular y cargadores.

Luego, sigue por otros productos importantes como tu ropa, tus zapatos y tus accesorios. Para finalizar, puedes agregar todo aquello que crees que usarás o piensas que puede servir en tu viaje.

El bolso de mano suele ser menos planificado pero ¡puede darnos muchas satisfacciones!

¿Qué pasa si nuestra maleta se extravía? ¿Qué hacemos si nuestra ropa de mancha o rompe en el viaje? El bolso de mano puede ser un plan B, en el caso de cualquier eventualidad.

Por lo tanto, es muy importante prepararlo con todo aquello que podemos necesitar, en caso de que algo salga mal.

Por ejemplo, podemos llevar dinero para comprar algo que necesitemos o una muda de ropa, en caso de tener que cambiarnos con urgencia.

Un consejo muy útil a la hora de empacar tu maleta es guardar grupos de productos o prendas en bolsas más pequeñas.

Puedes guardar tu ropa interior en una bolsa de tela más pequeña, usar un compartimento plástico para productos líquidos y un bolso más pequeño para llevar tus accesorios.

Esto mantendrá tu maleta organizada y te permitirá encontrar todas tus cosas, mucho más fácilmente.